Conectarse
Últimos temas
Administradores
Moderadores
Ubicación:
Fuyuki
Temperatura:
15º - 25º
Clima:
Cálido
Parallel Hearts.
2 participantes
Página 1 de 1.
Parallel Hearts.
Nuevamente miraba el reloj frente a ella, las 12:00 a.m., hacía mucho que estaba en ese lugar, contemplando su mano derecha con los Command Spells impresos en ella, tenían una forma ligeramente formando un círculo, estaban tan apegados a su piel que parecían tratarse de un tatuaje, lo que seguramente pensaría la mayoría de la gente al verlos. En su otra mano, la izquierda, cargaba un objeto morado, una reliquia obsequiada por su madre Sakura, el mayor de los tesoros que conservaban los Matous - Gorgon Breaker, ¿uh? - Susurró mirando el dispositivo, sabía a que espíritu heroico había pertenecido, así como la leyenda tras de él, obsequiado a Sakura por su servant en la guerra anterior, Medusa. Era bastante claro que si lo utilizaba, él único espiritu que podría responder a su llamado sería ella, cosa que no le molestaba a la joven Matou, confiaba en que la gorgona podría ser realmente poderosa y con su ayuda lo más seguro era que ganarían la guerra. ¿Qué la hacía dudar tanto? El tener el mismo servant que su antecesora, un hecho sin más, curioso. No, no quería imitar los pasos de su madre en cierta forma, quería forjar su propia vida pero al mismo tiempo, ambas le habían dicho de la fidelidad de Medusa hacía su master y el cariño especial que demostró tener. Algo realmente apreciable tratandose de una guerra, dónde todo era válido, hasta las traiciones por la espalda.
Aventó el antiguo Noble Phantasm hacia el centro del círculo que había dibujado ya, fue su primera acción al llegar al lugar, el sótano. Cuando sus pies tocaron nuevamente con firmeza el suelo, ya que había estado todo el tiempo sentada sobre alguna de esas cajas almacenadas, sintió el paso del tiempo, sintió el embriagador frío que recorrió su cuerpo de pies a cabeza, moviendo su juguetón cabello hacia un lado, haciendo que golpeará su cara. El viento parecía hacer una premonición de lo que pasaría en el lugar, era como si latiera con fuerza, como una caballo desbocado, golpeaba las ventanas como un loco queriendo salir de la cárcel y finalmente aullaba, como un lobo contemplando la luna llena, todo era una clara advertencia, una advertencia de que la tercera entraría en la guerra, una que probablemente nadie interpretaría. Comenzó a recitar aquellas palabras que seguramente, en su tiempo, sus madres habían recitado, empezó entonces a sentir como el aire era más helado, llenaba sus pulmones y la hacia sentir fría, como si estuviera caminando sobre pedazos de hielo pero no podía parar, ya no, se prometió a si misma que ganaría el Santo Grial y esta era solo la entrada - Te invoco a ti..¡Responde a mi llamado! - Finalizó con aquellas últimas palabras, antes de cegarse por la luz blanca que inundo la habitación, un haz de luz lo suficiente potente para dejarla anonadada por unos segundos, lo suficiente para espantarla y hacerla retroceder varios centímetros, hasta golpear con su parte posterior las cajas de los recuerdos - ¿Servant Rider? - Se maldijo mentalmente y en cuestión de un segundo, corrigió su pregunta - ¿Medusa? - La respuesta era posiblemente obvia, nadie más podía responder al llamado teniendo una reliquia tan relacionada con el espiritu heroico. Aún así fue meramente su instinto quién la hizo preguntar sobre la identidad de la mujer frente a ella, sí, podía observar entre el humo su silueta con difusidad, al igual que le pareció captar el aparato que uso como catalizador en los ojos de esta - Un éxito - Pensó la chica antes de soltar un suspiro de alivio.
Aventó el antiguo Noble Phantasm hacia el centro del círculo que había dibujado ya, fue su primera acción al llegar al lugar, el sótano. Cuando sus pies tocaron nuevamente con firmeza el suelo, ya que había estado todo el tiempo sentada sobre alguna de esas cajas almacenadas, sintió el paso del tiempo, sintió el embriagador frío que recorrió su cuerpo de pies a cabeza, moviendo su juguetón cabello hacia un lado, haciendo que golpeará su cara. El viento parecía hacer una premonición de lo que pasaría en el lugar, era como si latiera con fuerza, como una caballo desbocado, golpeaba las ventanas como un loco queriendo salir de la cárcel y finalmente aullaba, como un lobo contemplando la luna llena, todo era una clara advertencia, una advertencia de que la tercera entraría en la guerra, una que probablemente nadie interpretaría. Comenzó a recitar aquellas palabras que seguramente, en su tiempo, sus madres habían recitado, empezó entonces a sentir como el aire era más helado, llenaba sus pulmones y la hacia sentir fría, como si estuviera caminando sobre pedazos de hielo pero no podía parar, ya no, se prometió a si misma que ganaría el Santo Grial y esta era solo la entrada - Te invoco a ti..¡Responde a mi llamado! - Finalizó con aquellas últimas palabras, antes de cegarse por la luz blanca que inundo la habitación, un haz de luz lo suficiente potente para dejarla anonadada por unos segundos, lo suficiente para espantarla y hacerla retroceder varios centímetros, hasta golpear con su parte posterior las cajas de los recuerdos - ¿Servant Rider? - Se maldijo mentalmente y en cuestión de un segundo, corrigió su pregunta - ¿Medusa? - La respuesta era posiblemente obvia, nadie más podía responder al llamado teniendo una reliquia tan relacionada con el espiritu heroico. Aún así fue meramente su instinto quién la hizo preguntar sobre la identidad de la mujer frente a ella, sí, podía observar entre el humo su silueta con difusidad, al igual que le pareció captar el aparato que uso como catalizador en los ojos de esta - Un éxito - Pensó la chica antes de soltar un suspiro de alivio.
Harumi Walker- Mensajes : 38
Re: Parallel Hearts.
Y una vez más todo se reducía a aquel espacio muerto, frio y oscuro, una vez más aquellas cadenas que conformaban su leyenda la sujetaban como a una bestia indomable que debía ser controlada o causaría un mar de sufrimiento. Aún no había tenido una oportunidad de redención y en la mente de los hombres seguía siendo solo una espantosa bestia de leyendas antiguas y en ocasiones olvidadas, era la recompensa por su fama el que la eternidad la tratara como aquella bestia que había sido considerada en vida, pero en el fondo sabía que era mejor de ese modo, toda historia necesitaba de un héroe y todo héroe necesitaba de un villano, uno que sin importar sus motivos provocara unidad y un inquebrantable deseo de supervivencia en los humanos. Las cadenas tronaron con un movimiento brusco de parte de la mujer, teniendo en cuenta la información que ahora poseía sabía que era posible que aquella prisión fuera solo una creación de su mente atormentada, un modo de mantenerla ocupada mientras su verdadero ser reposaba en alguna especie de éxtasis, era esta tal vez la manera de que su mente no se atrofiara y que su ego no se perdiera con ella. Y era que solo bastaba desear algo de información para que estas llegaran a su mente como si nada, como si hubiera estado desde siempre conectada a un gran archivador que se activaba con el pensamiento. Era así como detalles de vidas ajenas eran parte de su mente, era así como si de un sueño se tratara se había podido ver a sí misma en otra era distinta a la suya, pero no era la era lo único que había cambiado. En aquellos recuerdos ajenos, ajenos de este modo porque no los sentía del todo propios, había intentado llevar la vida de una humana, había contenido aquella bestia interior para que en lugar de destruir la ayudara a proteger, si había una chica de quien alguna vez cuido en medio de un escenario de muerte y caos, en alguna guerra clandestina. Sin embargo no era como si pudiera contar la historia al pie de la letra o dar detalle de situaciones específicas, varios fragmentos habían sido arrebatados y parecían ser irrecuperables igualmente toda huella de los sentimientos impresos en aquellas memorias se habían evaporado, ahora todo era solo datos… era la vida que alguien más había vivido.
De golpe hubo algo que si recordó como propio, podía sentir aquella calidez que empezaba a recorrer su cuerpo y aquella energía pura que parecía susurrar discretamente, pidiendo su autorización para algo que sucedería pronto, algo que parecía ser importante. No hubo necesidad de que la mujer dijera algo, aquella fuerza la envolvía y se fusionaba con ella, ahora se daba cuenta que ya no estaba más en aquel lugar frio y oscuro, que aquellas cadenas ya no la ataban y que tal vez ya no era la entidad que probablemente continuaba allí; si la historia se repetía entonces ahora no era más que un pequeño fragmento de la original que era llevada a un lugar distinto para cumplir con su destino. Ahora con más claridad su mente se actualizaba con datos recientes, como si estuviera siendo preparada para todo lo que tendría que afrontar: Datos sobre la sociedad moderna, sobre el comportamiento humano, sobre tecnología y dispositivos que en su tiempo hubieran sido solo relatos de fantasía y que no se le hubieran atribuido ni siquiera al gran Hefestos: Desde motores de combustión hasta complejos sistemas de seguridad. Aunque eso sí, si aparte de aquel extraño lenguaje a algo se le había dado énfasis en sus datos era sobre vehículos de infinidad de categorías, algo que tuvo una explicación una vez las últimas piezas encajaron en su lugar: Servant, Rider, Santo Grial. Todo se detuvo de golpe como una montaña rusa que termina su recorrido y el final de aquel trayecto fue adornado por una embriagadora luz blanca que anunciaba la conclusión de su momentáneo viaje y el inicio de uno nuevo. Una voz dulce como la de una mujer que aún no ha llegado a la completa madurez confirmo su identidad, llamándola de golpe por su nombre real, algo tal vez un poco extraño –Eso es correcto- Afirmo la mujer con una voz serena -¿Eres tu mi Master?- Callo un momento como si tuviera que parafrasear para hacer aquella pregunta un poco más coherente -¿Fuiste tú quien me llamo hasta este lugar?- La Servant se encontraba de rodillas a unos pocos metros de la joven, las cadenas que antes la sujetaban ahora eran armas que empuñaba en sus manos. Hubo un corto silencio de su parte mientras contemplaba lo que la rodeaba, algo parecía fuera de lugar y no solo era que la joven la hubiera llamado por su nombre, por ejemplo aquel artefacto en la habitación que era idéntico al que ella lucia sobre sus ojos y que se suponía debía ser único en su clase, también el hecho de que estas paredes fueran tan familiares, sin duda las había visto antes.
De golpe hubo algo que si recordó como propio, podía sentir aquella calidez que empezaba a recorrer su cuerpo y aquella energía pura que parecía susurrar discretamente, pidiendo su autorización para algo que sucedería pronto, algo que parecía ser importante. No hubo necesidad de que la mujer dijera algo, aquella fuerza la envolvía y se fusionaba con ella, ahora se daba cuenta que ya no estaba más en aquel lugar frio y oscuro, que aquellas cadenas ya no la ataban y que tal vez ya no era la entidad que probablemente continuaba allí; si la historia se repetía entonces ahora no era más que un pequeño fragmento de la original que era llevada a un lugar distinto para cumplir con su destino. Ahora con más claridad su mente se actualizaba con datos recientes, como si estuviera siendo preparada para todo lo que tendría que afrontar: Datos sobre la sociedad moderna, sobre el comportamiento humano, sobre tecnología y dispositivos que en su tiempo hubieran sido solo relatos de fantasía y que no se le hubieran atribuido ni siquiera al gran Hefestos: Desde motores de combustión hasta complejos sistemas de seguridad. Aunque eso sí, si aparte de aquel extraño lenguaje a algo se le había dado énfasis en sus datos era sobre vehículos de infinidad de categorías, algo que tuvo una explicación una vez las últimas piezas encajaron en su lugar: Servant, Rider, Santo Grial. Todo se detuvo de golpe como una montaña rusa que termina su recorrido y el final de aquel trayecto fue adornado por una embriagadora luz blanca que anunciaba la conclusión de su momentáneo viaje y el inicio de uno nuevo. Una voz dulce como la de una mujer que aún no ha llegado a la completa madurez confirmo su identidad, llamándola de golpe por su nombre real, algo tal vez un poco extraño –Eso es correcto- Afirmo la mujer con una voz serena -¿Eres tu mi Master?- Callo un momento como si tuviera que parafrasear para hacer aquella pregunta un poco más coherente -¿Fuiste tú quien me llamo hasta este lugar?- La Servant se encontraba de rodillas a unos pocos metros de la joven, las cadenas que antes la sujetaban ahora eran armas que empuñaba en sus manos. Hubo un corto silencio de su parte mientras contemplaba lo que la rodeaba, algo parecía fuera de lugar y no solo era que la joven la hubiera llamado por su nombre, por ejemplo aquel artefacto en la habitación que era idéntico al que ella lucia sobre sus ojos y que se suponía debía ser único en su clase, también el hecho de que estas paredes fueran tan familiares, sin duda las había visto antes.
Medusa- Servant - Rider
- Mensajes : 44
Datos
Nivel: 2
Experiencia:
(70/350)
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Dom Abr 03, 2016 5:33 am por Alkaios
» {Cambio de botones} Afiliado élite Amaranth
Dom Dic 29, 2013 7:59 pm por Invitado
» la lame contre la rage
Mar Dic 17, 2013 1:57 pm por Arcueid
» Anime Rol [Élite]
Lun Nov 25, 2013 10:34 pm por Invitado
» soy nuevo y nose que hacer
Mar Oct 08, 2013 11:26 pm por victorsoto
» Advertencia sobre foro afiliado "Amaranth"
Vie Oct 04, 2013 5:54 am por Invitado
» the story of my life
Sáb Ago 10, 2013 7:06 pm por Ren Yame
» The Fairy Land cambio de Boton } Normal
Jue Ago 01, 2013 9:46 pm por Invitado
» Confesionario
Jue Jul 25, 2013 4:50 pm por La Hire